Durante el siglo antepasado y hasta la década de los años cincuenta,las abuelas hacían o encargaban a las monjas,unos pequeños cojines con el Sagrado Corazón de Jesús bordado a mano. En su interior ponían un fragmento de los evangelios,una gota del Cirio pascual,palma bendita,incienso y alguna otra reliquia. Estos pequeños cojines eran entregados a hijos y nietos para su protección.
Miscelánea El Gran Chisme,pone a la venta el DETENTE bordado a mano en un pequeño cuadro de 10X15 cm,como una auténtica copia del siglo XIX.